Vela por fin disfruta del futbol

Teo Cuenca

A Carlitos Vela le llegó el éxito muy temprano. Con apenas 17 años se coronaba como campeón del mundo de la especialidad junto a una camada de jóvenes promesas (donde la gran mayoría se quedaron solo en eso, promesas), entre ellas el mexicano hijo de brasileños, Giovani Dos Santos. 

Vela anunció recientemente que se retira de la selección para dar paso a nuevas a nuevos jugadores mexicanos que tienen la sed de triunfo. 

Cierto es que el tapatío, aunque fue pieza clave en varios de los equipos que jugó en Europa, nunca pudo consolidarse como se esperaba. Las expectativas para el joven eran muy altas por parte de aficionados y comentaristas. Lo mismo ocurrió con los hermanos Dos Santos.

A Vela parecía que la presión le hacía pesado los pasos y entorpecía su técnica. Ya había conseguido el máximo trofeo que la selección nacional podría aspirar en todas sus categorías.

Tal vez no había más que ganar para él. Muchos competidores de alto rendimiento han pasado por situaciones similares y en su momento han argumentado que ya no tenían motivos para seguir ganando.

Tal parece que a Vela se le apagó el interés durante gran parte de su carrera por “apantallar” al mundo. No había más porque luchar y él ya no gozaba el futbol. 

La novela que se vivió previo al mundial de Brasil 2014, donde el jugador de la MLS se negaba a competir en la máxima justa mundialista, cerró con un mensaje para los mexicanos que calló la polémica generada en aquel momento. 

“En este proceso que se ha ido desarrollando para la próxima justa mundialista, no he estado mentalmente al 100% para representar o formar parte de este representativo, el cual merece el máximo de mi respeto”, escribía Vela en una carta con respecto a la insistencia de los medios y los aficionados para que se incorporara a la selección nacional comandada por Miguel Herrera. 

Cero responsabilidades 

Entonces llegó la gran oferta, la MLS ofrecía una atractiva cantidad de dólares para el excampeón sub17. 

Muchos analistas deportivos lamentaban la noticia e incluso lo criticaban por aceptar la oferta, menospreciando al futbol estadounidense, insistiendo que se quedara en el viejo continente. 

Entre toda la polémica Vela llega a la MLS, caso similar a Dos Santos, quien había llegado desde el 2015.

Por fin, Vela se había quitado un peso de encima y eso se notó en la cancha, sin toda esa presión que los mexicanos amantes del deporte de las patadas ejercían sobre él; El jalisciense por fin se divertía jugando al futbol como en su momento lo hizo cuando era un adolescente de 17 años y se convirtió en campeón del mundo.

Ahora, “Cracklitos” la está rompiendo, con una enorme sonrisa por la que también le empezaron a apodar “la Hiena”, síntoma que refleja lo feliz que está en Estados Unidos, en una liga en constante crecimiento con figuras aún vigentes en el panorama del futbol mundial.

Ahí, Vela es un Cristiano Rolando metiendo goles y un Messi dando asistencias. 

Muy probable que se convierta en el MVP de la MLS y en el máximo romperredes de esta temporada, además de quitarle récords a jugadores mexicanos que han competido en la liga de los Estados Unidos.

Vela por fin hace lo segundo que más le gusta, jugar al futbol, puesto que lo primero, dijo en una entrevista, es que le hubiera encantado ser basquetbolista.